¿Por qué se forma la odiosa piel de naranja?

Lo que comúnmente conocemos como “celulitis”, se denomina fibroedema geloide subcutáneo. Este consiste en una alteración del tejido subcutáneo en el cual se produce un acúmulo de grasa y retención de agua. Las células de este tejido aumentan de tamaño y ejercen presión sobre los vasos sanguíneos dificultando la circulación, la piel toma un aspecto rugoso propio de la tan conocida y poco deseada "piel de naranja". Esto es debido a un fallo en el sistema linfático (encargado de depurar los productos de desecho de los tejidos), de forma que se produce un acumulo de toxinas. La circulación linfática depende de las contracciones musculares, por lo que una vida sedentaria y sin ejercicio producirán una alteración en esta.

Formación de la celulitis
Fuente: www.esalud.com

El 50% de las mujeres padecen celulitis, manifestándose a partir de la pubertad. Es importante diferenciarla de la obesidad, ya que esta se produce por un aumento del tamaño de las células adiposas, mientras que en la celulitis se produce un cambio estructural de estas células. Además, en caso de obesidad la piel es suave sin aspecto de piel de naranja ni dolor como en el caso de la celulitis.

Este cuadro puede estar producido por:

• Un cambio hormonal como la pubertad, el embarazo o la menopausia, siendo las principales protagonistas la progesterona y los estrógenos. 

• Una cuestión genética, ya que los antecedentes familiares de obesidad y de celulitis son factores predisponentes de primer orden para padecer la enfermedad, así como madres con problemas circulatorios, principalmente varicosos.

•  La insuficiencia venosa en las extremidades inferiores por el hecho de que la circulación es lenta y sustancias que no se eliminan.

• El tabaco, alcohol y café tienen repercusión tanto a nivel del sistema circulatorio como del sistema nervioso.

• Una vida sedentaria, prácticamente sin ejercicios físicos favorece sin duda la aparición de la celulitis. 

• Factores psicológicos adversos como depresiones, ansiedad y estrés actúan sobre el sistema hipotálamo-hipofisiario, originando una alteración en la producción de estrógenos dando lugar a una retención hídrica y alteraciones metabólicas.

• La dispepsia y el estreñimiento condicionan el aumento de tóxicos y metabolitos que facilitarán su desarrollo.

Teniendo en cuenta que la celulitis se debe a diferentes causas, su tratamiento debe encargarse de todas ellas. De esta forma debe presentar una acción lipolítica reductora de grasas, una acción alisadora que consistirá en inhibir la fijación de las proteínas del colágeno responsable de la aparición de la piel de naranja, debe aumentar la resistencia capilar, disminuir su permeabilidad y activar la circulación, favoreciendo así el drenaje de las sustancias tóxicas y del agua. 

Antes y después del tratamiento para la celulitis.
Fuente: www.clinicabruselas.com

El tratamiento podrá ser tópico, actuando sobre los factores fisiopatológicos generales y además mejoran el aspecto y la textura de la piel, pero su aplicación debe ser constante y es un complemento de las demás formas de tratamiento. También se podrá  recurrir a la presoterapia, para el drenaje y la resolución de edemas. Consiste básicamente en unas botas neumáticas en las que se introducen las piernas. Estas botas se hinchan progresivamente en sentido ascendente ocasionado una gran activación circulatoria con efectos muy positivos en los problemas linfáticos, reabsorción de edemas y celulitis edematosa y ocasionan un gran descanso en las piernas de las pacientes. Y por último el drenaje linfático manual, mediante un masaje totalmente traumático cuyo fin es ayudar al retorno de la linfa a sus centros colectores. Además, también se puede tratar con radiaciones electromagnéticas.

Enlaces: https://sisbib.unmsm.edu.pe/bvrevistas/folia/vol14_n1_2003/fibroedema.htm